Durante el invierno la piel se ve expuesta a grandes cambios de temperaturas y sobre todo la cara puede presentar resequedad y descamarse por bajas temperas, que hacen que no luzca saludable y bella. La piel posee en la superficie una protección especial formada por una fina capa de agua y grasa para hacer frente a las agresiones del medio ambiente, pero también esta barrera natural se deteriora con el paso del tiempo. Por ello, durante los días de frío la piel requiere de un cuidado especial para preservar su salud y por lo tanto, su belleza. Efectos del frío De acuerdo con la Dermatóloga Patricia García, el frío disminuye el flujo de sangre en la piel, reduce la percepción sensorial y puede alterar las propiedades físicas de los tejidos. Es decir, con temperaturas bajas la piel se reseca, descama, enrojece y se siente tirante. De hecho, en condiciones extremas, por debajo del punto de congelación, el frío puede provocar la necrosis de los tejidos. Durante esta temporada la piel se deshidrata debido a que el frío disminuye la humedad del aire, esto la reseca a tal grado que pueden aparecer grietas e incluso fisuras.Habitualmente se cree que las mujeres son mucho más susceptibles a que su piel se reseque, no obstante, también le sucede a los hombres. Por ello, durante esta temporada lo más recomendable es utilizar una crema emoliente, que además hidrate de forma intensa para ayudar a reestructurar la barrera cutánea y calme la piel irritada. Existen infinidad de personas cuya piel responde a las temperaturas bajas, es decir, se inflama, enrojece o irrita. Ante este escenario será necesario echar mano de un producto que forme una barrera protectora para aislar la piel de los agentes externos que la irritan. Cabe resaltar que el frío también daña los labios, por ello es indispensable utilizar un producto diseñado específicamente para esta parte del cuerpo que ayude a prevenir fisuras o para restaurarlos cuando están partidos. De acuerdo con los expertos en el tema, el uso de protector solar es indispensable en esta temporada. Recordemos que los rayos solares actúan sobre la piel de forma constante, aún en los días nublados. Otro tipo de protección y no menos importante es cubrir la piel usando bufandas, gorros, guantes y lentes de sol. Cabe mencionar que esto no sustituye en forma alguna el uso de cremas y de protectores solares, los cuales son necesarios en esta época. Para mantenerla perfecta - Evitar ducharse varias veces al día y abusar de los jabones en barra. -Procurar no exponerse a cambios bruscos de temperatura y evitar la ropa que no permita una adecuada ventilación. -Aumentar la ingesta de líquidos y frutas de temporada. -Evitar los baños con agua muy caliente, ya que ésta aumenta la deshidratación cutánea.