Intentó que su ruptura con Jesus Luz fuese discreta y silenciosa, sin embargo, la discreción no es precisamente el fuerte de Madonna. Lejos de sufrir por el final de su relación con el modelo brasileño, la cantante se ha dejado ver en la noche neoyorquina, en actitud muy cariñosa -con apasionados besos incluidos-, con el que ha sido su coreógrafo durante la gira Sticky & Sweet, Brahim Rachiki. Poco se sabe de este bailarín, aunque lo suficiente para asegurar que Madonna sigue fiel a sus preferencias decantándose de nuevo por un joven exótico, casi 20 años más joven que ella, algo más maduro que su ex-pareja, con la que se llevaba 28 años de diferencia. Según algunos medios, los representantes de la cantante aseguran que Madonna no tiene un nuevo romance. Pese a ello, la noticia ya ha dado la vuelta al mundo, y ya podemos poner cara a esta nueva conquista. Viernes, 22 de Octubre de 2010