Todo fue por mensajes de celular, herramienta común que ha terminado con un sin número de relaciones en el mundo de los mortales, pero que también alcanza a las celebridades como Eva Longoria.
La irresistible Gabrielle Solís de “Desperate Housewives” es el ingreso más reciente al tristemente célebre “Club de las engañadas”, en el que se encuentran famosas cuya fama, belleza y encanto resultó insuficiente para sus respectivas parejas.
La actriz de origen hispano es la segunda celebridad en el año que atraviesa por una dolorosa ruptura, cuyos detalles se filtran poco a poco a las páginas de la prensa, como en su momento le ocurrió a Sandra Bullock cuando salió a la luz la infidelidad de su esposo Jesse James, tan sólo días después de que ganara el Oscar como Mejor Actriz.
En el “anuario” del club, existen otros nombres, como Jennifer Aniston, Elizabeth Hurley, Sienna Miller y Reese Whiterspoon. Estas son sus historias.
El escándalo estalló a través de TMZ. El sitio especializado en celebridades reveló que Tony Parker había presentado una solicitud de divorcio de Eva Longoria, el desmentido no tardó en llegar aunque fue fugaz.
Al día siguiente la publicista de la actriz confirmó que era ella la que había iniciado los trámites de separación alegando “diferencias irreconciliables”, poco después se supo que el verdadero motivo era que el jugador de los Spurs de San Antonio le había sido infiel con la esposa de un compañero de equipo. Sus compañeros señalan que sólo se trató de un coqueteo a través de mensajes sin contacto alguno, pero el divorcio es inminente.
Hasta el 8 de marzo la vida de Sandra Bullock era perfecta. Esa noche, le arrebató a Merryl Streep el Oscar como Mejor Actriz, aunque su mundo se derrumbaría a los pocos días.
Sorpresivamente, Sandra canceló la promoción de la película “Un sueño posible” por problemas personales, que obedecían a que su esposo Jesse James la había engañado con una modelo de tatuajes mientras ella se encontraba trabajando.
Bullock se mantuvo alejada de la vida pública, mientras que su marido le pedía perdón y su amante también le ofrecía disculpas en televisión. La separación se oficializó tres meses después.
Jennifer Aniston y Brad Pitt fueron la “pareja dorada” de Hollywood durante poco más de cuatro años. La belleza de ambos era el complemento perfecto para un amor de película hasta que apareció Angelina Jolie.
En 2004 Pitt entró al set de “Señor y señora Smith” y terminó flechado por su coestrella. Aunque se rumoró que la razón del divorcio fue que Aniston se negó a darle hijos, Pitt no tuvo problema de mostrarse en público con Angelina, lo cual hizo estallar a la “america’s sweetheart” en certera entrevista a Vogue. Seis años después, Brad tiene tres hijos con Jolie, mientras Jennifer se mantiene en busca del amor.
Sienna Miller y Jude Law se conocieron en 2003 durante el rodaje de “Alfie”. Al contrario de lo que ocurrió en la pantalla, la rubia logró atrapar al cotizado casanova y se comprometieron en Navidad de 2004.
Unos meses después, Jude engañó la actriz con la mujer que cuidaba a sus hijos mientras él trabajaba. Ese no fue el primer desliz de Law, pues su primer matrimonio con la diseñadora Sadie Frost, terminó por las mismas causas.
A partir de entonces Jude y Sienna protagonizaron incontables rupturas y reconciliaciones, e incluso salieron con otras personas, sin embargo, su amor ganó la partida y terminaron casándose en secreto a través de un rito en Asia en agosto de este año.
Durante un tiempo Hugh Grant fue el hombre más odiado del mundo por dos razones: Por tener a su lado a la impactante Elizabeth Hurley y por engañarla.
El amor entre ambos nació casi al mismo tiempo que su carrera profesional. Durante años caminaron de la mano en numerosos eventos y rincones del mundo hasta que en 1995, el actor, quien probaba suerte en EU fue arrestado por la policía de Los Ángeles mientras una prostituta le practicaba sexo oral.
Aunque en un principio lo defendió, Liz no resistió y el romance terminó en el año 2000. No obstante lograron superar los momentos difíciles y se mantienen como grandes amigos, a tal grado que él es padrino de su hijo Demian y ella no tiene problema en reconocer que siempre será “su número uno”.
Todo fue por mensajes de celular, herramienta común que ha terminado con un sin número de relaciones en el mundo de los mortales, pero que también alcanza a las celebridades como Eva Longoria.
La irresistible Gabrielle Solís de “Desperate Housewives” es el ingreso más reciente al tristemente célebre “Club de las engañadas”, en el que se encuentran famosas cuya fama, belleza y encanto resultó insuficiente para sus respectivas parejas.
La actriz de origen hispano es la segunda celebridad en el año que atraviesa por una dolorosa ruptura, cuyos detalles se filtran poco a poco a las páginas de la prensa, como en su momento le ocurrió a Sandra Bullock cuando salió a la luz la infidelidad de su esposo Jesse James, tan sólo días después de que ganara el Oscar como Mejor Actriz.
En el “anuario” del club, existen otros nombres, como Jennifer Aniston, Elizabeth Hurley, Sienna Miller y Reese Whiterspoon. Estas son sus historias.
El escándalo estalló a través de TMZ. El sitio especializado en celebridades reveló que Tony Parker había presentado una solicitud de divorcio de Eva Longoria, el desmentido no tardó en llegar aunque fue fugaz.
Al día siguiente la publicista de la actriz confirmó que era ella la que había iniciado los trámites de separación alegando “diferencias irreconciliables”, poco después se supo que el verdadero motivo era que el jugador de los Spurs de San Antonio le había sido infiel con la esposa de un compañero de equipo. Sus compañeros señalan que sólo se trató de un coqueteo a través de mensajes sin contacto alguno, pero el divorcio es inminente.
Hasta el 8 de marzo la vida de Sandra Bullock era perfecta. Esa noche, le arrebató a Merryl Streep el Oscar como Mejor Actriz, aunque su mundo se derrumbaría a los pocos días.
Sorpresivamente, Sandra canceló la promoción de la película “Un sueño posible” por problemas personales, que obedecían a que su esposo Jesse James la había engañado con una modelo de tatuajes mientras ella se encontraba trabajando.
Bullock se mantuvo alejada de la vida pública, mientras que su marido le pedía perdón y su amante también le ofrecía disculpas en televisión. La separación se oficializó tres meses después.
Jennifer Aniston y Brad Pitt fueron la “pareja dorada” de Hollywood durante poco más de cuatro años. La belleza de ambos era el complemento perfecto para un amor de película hasta que apareció Angelina Jolie.
En 2004 Pitt entró al set de “Señor y señora Smith” y terminó flechado por su coestrella. Aunque se rumoró que la razón del divorcio fue que Aniston se negó a darle hijos, Pitt no tuvo problema de mostrarse en público con Angelina, lo cual hizo estallar a la “america’s sweetheart” en certera entrevista a Vogue. Seis años después, Brad tiene tres hijos con Jolie, mientras Jennifer se mantiene en busca del amor.
Sienna Miller y Jude Law se conocieron en 2003 durante el rodaje de “Alfie”. Al contrario de lo que ocurrió en la pantalla, la rubia logró atrapar al cotizado casanova y se comprometieron en Navidad de 2004.
Unos meses después, Jude engañó la actriz con la mujer que cuidaba a sus hijos mientras él trabajaba. Ese no fue el primer desliz de Law, pues su primer matrimonio con la diseñadora Sadie Frost, terminó por las mismas causas.
A partir de entonces Jude y Sienna protagonizaron incontables rupturas y reconciliaciones, e incluso salieron con otras personas, sin embargo, su amor ganó la partida y terminaron casándose en secreto a través de un rito en Asia en agosto de este año.
Durante un tiempo Hugh Grant fue el hombre más odiado del mundo por dos razones: Por tener a su lado a la impactante Elizabeth Hurley y por engañarla.
El amor entre ambos nació casi al mismo tiempo que su carrera profesional. Durante años caminaron de la mano en numerosos eventos y rincones del mundo hasta que en 1995, el actor, quien probaba suerte en EU fue arrestado por la policía de Los Ángeles mientras una prostituta le practicaba sexo oral.
Aunque en un principio lo defendió, Liz no resistió y el romance terminó en el año 2000. No obstante lograron superar los momentos difíciles y se mantienen como grandes amigos, a tal grado que él es padrino de su hijo Demian y ella no tiene problema en reconocer que siempre será “su número uno”.
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